Intento fallido de reparar las bisagras de un armario
2014-11-19
Traté de reparar las bisagras de un armario. Los soportes de varias, hechos de algún tipo de material termoplástico, se habían partido. Estos soportes son piezas aproximadamente prismáticas que van ancladas en sus dos extremos al panel y tienen una tuerca prisionera en el punto medio que sirve para sujetar el resto de la bisagra mediante un tornillo. Al abrir y cerrar las puertas, los soportes quedan cargados a flexión como vigas cortas que son y los que estaban rotos estaban claramente seccionados de acuerdo con este estado de carga. La siguiente fotografía muestra un soporte sano:
Soporte original intacto.
La siguiente fotografía muestra un soporte partido:
Soporte original partido.
Decidí hacer unos soportes nuevos de madera de abeto con la fibra orientada en la dirección de su directriz, de manera que el material ofreciera su resistencia máxima (que es el doble o el triple la del típico plástico técnico no reforzado) precisamente contra el estado de carga que hizo que se partieran los soportes originales. Rellené con masilla los agujeros del anclaje al panel que tenían los soportes originales y fijé los soportes nuevos con tirafondos de 3 mm. El plano es así:
Plano de los soportes. Las distancias están dadas en milímetros.
Hice un primer prototipo en tilo antes de empezar con el abeto.
Terminando de fresar un prototipo.
Base del soporte. El hueco central (excesivamente profundo en
este prototipo) sirve para alojar una tuerca cautiva para el tornillo
M3 que sostendrá el cuerpo de la bisagra.
La siguiente fotografía muestra uno de los soportes nuevos ya instalado:
Soporte de madera ya instalado.
Aunque la madera de abeto tiene una resistencia muy interesante en la dirección de la silla, puede astillarse con cierta facilidad ante cargas perpendiculares a la fibra. Quise dejar que el maltrato del uso cotidiano sirviera para determinar la robustez de la reparación, pero empezaron a desintegrarse, además de los soportes originales, las cazoletas de las bisagras (hechas del mismo material termoplástico), lo que provocó caídas de puertas e impactos que definitivamente sí fueron demasiado violentos para la pobre madera de abeto, que se astilló de forma bastante catastrófica.
Como la epidemia de desintegración de piezas de plástico no hacía más que frustrar lo que inicialmente parecía una intervención mínima, conseguí bisagras nuevas hechas completamente de acero.
Categorías: DIY
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