…esto no es un subtítulo…
2015-10-07
Un sistema termodinámico que realiza un proceso adiabático se caracteriza por el hecho de no intercambiar calor ni materia con el exterior en dicho proceso. La frontera del sistema no tiene por qué ser impermeable al calor y la materia (aunque si lo es, cualquier proceso en tal sistema será adiabático); lo único que importa en esta definición de proceso es que las únicas interacciones con el exterior sean en forma de trabajo.
La definición de proceso adiabático hace referencia únicamente a los intercambios con el exterior del sistema bajo estudio. El sistema en sí puede estar dividido en una cantidad inmensa de subsistemas y puede haber perfectamente intercambios de calor y materia entre dichos subsistemas; el conjunto realiza un proceso adiabático independientemente de lo que hagan sus subsistemas entre sí las interacciones con el exterior son únicamente en forma de trabajo sin intercambio de calor ni intercambio de materia.
Un sistema cuya frontera es adiabática es, por lo tanto, un caso especial entre los sistemas cerrados: además de no permitir intercambio de materia, tampoco se permite el intercambio de calor. Aunque no es viable construir paredes perfectamente adiabáticas, sí es posible hacerlas efectivamente adiabáticas en muchos casos prácticos. Para tiempos lo bastante cortos, las neveras y los termos actúan como contenedores de paredes adiabáticas en tiempos lo bastante cortos para que no se aprecien ni la transmisión de calor ni el paso del aire a través de las rendijas. Por supuesto, si se espera el tiempo suficiente, cualquier recipiente «adiabático» acaba dejando pasar cantidades apreciables tanto de calor como de materia.
Categorías: Física
Permalink: https://sgcg.es/articulos/2015/10/07/los-procesos-adiabaticos-en-termodinamica/